Lo mal que estaba antes, y lo "bien" que estoy ahora.
Nunca he sido una chica sociable, nunca he tenido muchos amigos, más bien todo lo contrario, me he pasado media vida así. Podía contarlos con los dedos de una mano. Mientras, a mi alrededor veía cómo el resto del mundo se relacionaba, cómo todas las chicas de clase se reunían en los recreos con los chicos de clase. Hablaban, se reían, parecía que lo pasaban bien. En cambio yo, me sentía mal con ellos, no les entendía y jamás les he entendido. No entendía cómo a las chicas les podía gustar ir de compras, vestirse bien, maquillarse, imitar a las "mayores". Tampoco cómo los chicos solo se acercaban a las guapas, cómo se metían con las feas, como hacían trastadas y adoraban saltarse las normas de clase. Siempre he sido así y nunca me he dado cuenta. Cambió mi vida y pensé que esto iba a cambiar. Claro que ha cambiado, ahora conozco a mucha más gente, ¿pero los amigos? ya ni siquiera los puedo contar con los dedos de una mano, ni con medio dedo siquiera. La esperanza es capa